Un avión con 62 personas a bordo se estrelló el viernes por la tarde en una zona residencial de Vinhedo, en el estado de São Paulo, Brasil, sin dejar sobrevivientes. La aeronave, un ATR 72-500 de la aerolínea Voepass, volaba desde Cascavel, Paraná, hacia el aeropuerto de Guarulhos, cuando perdió contacto con el control aéreo a unos 20 minutos de su destino. Aunque el impacto causó daños a una vivienda, no hubo heridos en tierra.
Las imágenes difundidas muestran al avión descendiendo en picada antes de estrellarse. Aún se desconocen las causas del accidente, pero las autoridades han recuperado las cajas negras para la investigación. La Fuerza Aérea Brasileña informó que el vuelo se desarrollaba con normalidad hasta que se perdió todo rastro del avión, sin que se reportara alguna emergencia.
Este accidente es el más grave en Brasil desde 2007, cuando un avión de TAM se estrelló, matando a 199 personas. Hasta la tarde del sábado, se habían recuperado 21 cuerpos y dos víctimas habían sido identificadas. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva y el gobernador de São Paulo, Tarcísio de Freitas, expresaron sus condolencias a las familias afectadas.