El patrimonio bruto de las iglesias está por encima de los $15 billones de pesos
El proyecto de la reforma tributaria presentado por el Gobierno de Gustavo Petro, pasó el primer debate en las Comisiones Económicas del Congreso, con una votación que duró cerca de 10 horas y contó con 900 proposiciones.
Una de las discusiones fue la inclusión de las iglesias y confesiones religiosas en el régimen ordinario del impuesto sobre la renta y complementarios respecto de los ingresos provenientes de actividades comerciales a una tarifa del 20%.
“Estamos muy felices con la aprobación de nuestro artículo que les pone impuestos a las iglesias. Es un impuesto a la renta del 20% para todas las actividades económicas que estén por fuera del rito, culto, beneficencia o educación. Esto es un gran avance porque si algunas iglesias se comportan como empresas, pues que paguen como empresas”, celebró la representante a la Cámara, Katherine Miranda.
Así las cosas, según el artículo 72 de la ponencia, todas las iglesias deberán pagar impuestos sobre sus actividades que no estén asociadas con el oficio religioso, el culto y actividades de educación o beneficencia.
Además, la ley, próxima aprobarse, también indica que las iglesias deberán estar reconocidas por el ministerio del Interior o por “la ley”.
Según el Ministerio de Interior, la Dian calcula que el patrimonio bruto de las iglesias está por encima de los $15 billones de pesos, y que en el país hay cerca de 8.000 congregaciones, las cuales generan unos 260 mil empleos formales.