Los cuerpos encontrados pertenecen a los dos ganaderos y al conductor que los transportaba, identificados como Carmelo Badel, Julio Ordoñez y Jaime Monroy.
La esperanza de tres familias del municipio sucreño de Corozal de encontrar con vida a sus seres queridos se ha visto desvanecida. El martes 23 de mayo, funcionarios de la Fiscalía General de la Nación y Medicina Legal contactaron a los familiares para obtener muestras de ADN en la ciudad de Santa Marta. Esta medida se tomó tras el hallazgo de los cuerpos dentro de sacos, el domingo pasado, en una zona rural de Riohacha, la capital del departamento de La Guajira.
Según las autoridades, se presume que los cuerpos encontrados pertenecen a los dos ganaderos y al conductor que los transportaba, identificados como Carmelo Badel, Julio Ordoñez y Jaime Monroy. Estos hombres fueron vistos por última vez el 29 de abril en el sector turístico de Buritaca, ubicado en el área rural de Santa Marta.
En esa ocasión, Carmelo Badel, el conductor del vehículo en el que se desplazaban, envió una fotografía y la ubicación a sus familiares debido a la falta de confianza que le generaban las personas con las que se encontraba. Después de ese mensaje, los teléfonos móviles de Carmelo, Julio y Jaime se apagaron, perdiéndose todo contacto con ellos.
Los familiares de los tres hombres se desplazaron a Santa Marta, donde se llevará a cabo el proceso de identificación de los cuerpos. Las autoridades han confirmado que, hasta el momento, la principal hipótesis es que se trata de los tres sucreños que estuvieron desaparecidos durante más de 20 días.
Este trágico suceso ha generado conmoción en la región, y las autoridades continúan trabajando para esclarecer los hechos y determinar las circunstancias que rodearon la desaparición y muerte de los tres hombres. La comunidad espera que se haga justicia y que se encuentren responsables de este terrible crimen que ha dejado a tres familias sumidas en el dolor y la incertidumbre.