La reforma fue archivada en el Congreso de la República debido a la falta de quórum en el último día de la legislatura.
En una jornada llena de expectativas y tensiones, la reforma laboral impulsada por el gobierno del presidente Gustavo Petro sufrió un duro golpe al ser archivada en el Congreso de la República debido a la falta de quórum en el último día de la legislatura. A pesar de los esfuerzos por debatir gran parte de su contenido, la iniciativa finalmente fue sepultada.
El bloqueo de algunos partidos políticos al proyecto de ley fue uno de los factores determinantes que contribuyó a esta decisión, ya que impidieron que se alcanzara el quórum necesario para su aprobación. Durante varias semanas, la reforma laboral estuvo en la agenda de la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes, sin embargo, las sesiones tuvieron que ser pospuestas en repetidas ocasiones debido a la falta de personal para discutirla y votarla.
El pasado jueves 15 de junio, se logró reunir el quórum gracias a la participación del conservador Jorge Alexánder Quevedo, y se dio luz verde al informe de ponencia, generando un rayo de esperanza para los defensores de la reforma. Sin embargo, este martes, en el último día de sesiones ordinarias, la falta de quórum volvió a hacerse presente, llevando al hundimiento definitivo de la reforma laboral, una de las principales propuestas del presidente Gustavo Petro.
A pesar de este revés, algunas voces del Pacto Histórico, movimiento político liderado por Petro, señalan que el articulado podrá ser debatido en sesiones extraordinarias, manteniendo así una pequeña esperanza para retomar el proyecto.
El presidente Gustavo Petro expresó su decepción por el hundimiento de la reforma laboral y manifestó su preocupación por la falta de voluntad de paz y pacto social en el poder económico.