La Fiscalía General de la Nación presentó acusaciones contra María Isabel Urrutia, quien fue la primera ministra del Deporte en el Gobierno del presidente Gustavo Petro en Colombia. La acusación se basa en el presunto delito de contrato sin cumplimiento de requisitos legales.
Según el informe Urrutia habría firmado 104 contratos por «motivos personales» entre el 2 y el 6 de marzo de un año determinado (aunque no se especifica el año en el artículo) cuando ya se había comprometido a dejar su cargo el 13 de ese mismo mes. El presidente Petro había solicitado su renuncia a finales de febrero en un cambio de gabinete.
La medallista habría terminado estos contratos antes de su salida del cargo y luego los habría renovado «en la noche» y de manera rápida, extendiendo su duración hasta el 31 de diciembre de un año determinado. La Fiscalía argumenta que esto se hizo de manera indebida para favorecer a los contratistas del Ministerio que ella dirigía en ese momento.
La exministra argumentó que cuando firmó los nuevos contratos aún servía como ministra y que solo fue formalmente notificada del cese de su puesto tres meses después de que el presidente le pidiera la renuncia. Sin embargo, la Fiscalía sostiene que Urrutia actuó en contra de la ley y que la forma legal de llevar a cabo estos contratos habría sido esperar a que culminaran y luego firmar nuevos contratos si fuera necesario.
María Isabel Urrutia es conocida en Colombia por sus logros deportivos, que incluyen la obtención de una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Sídney en el año 2000. Posteriormente, incursionó en la política y fue ministra del Deporte durante un período específico antes de enfrentar estas acusaciones legales.