En hecho que aún es materia de investigación, a mediados del presente mes de octubre le quitaron la vida a Héctor Fabián Bonilla Ulloa, un ganadero que tuvo una relación con la actriz colombiana Marilyn Patiño y que se convirtió en el padre de sus dos hijos.
El crimen de Bonilla Ulloa ocurrió en Cali, ciudad a la que él había viajado en compañía de su novia actual, aparentemente por un tema laboral. Las autoridades están investigando que hay detrás del suceso y quienes y por qué pudieron haber decidido ultimar a este hombre.
Al respecto, la actriz se sinceró por medio de su cuenta en Instagram, y manifestó que está viviendo un duelo muy grande, especialmente por sus hijos que han quedado huérfanos de padre, motivo por el cual exigió respeto y cese de las especulaciones y rumores.
“Hace pocos días nos enteramos de la muerte del papá de mis hijos, Héctor Fabián Bonilla Ulloa. Él estaba de viaje en Cali, tenía finca ganadera en el Cauca y, seguramente, iba a su tema de la ganadería, estaba con su novia, con la que ya llevaba dos años. Ella fue la última persona que lo vio con vida, debe saber más”, dijo.
“Pido que me respeten mi derecho a la privacidad por mis hijos, es un dolor muy grande porque mis hijos se han quedado sin papá, no me interesan venganzas ni represalias, pero pido que me dejen quieta, pido que no se metan conmigo, no voy a recibir extorsiones ni ningún tipo de chantajes… Todo esto está en manos de las autoridades, mi abogado es Abelardo de la Espriella, cualquier pregunta o lo que deseen, en el despacho con él”, agregó.
An 2015 ella pasó por una situación similar, ya que un empresario antioqueño con quien tuvo una relación sentimental, falleció en un accidente de tránsito. El hombre perdió la vida junto a la que era su pareja de entonces, la también actriz Adriana Campos.