El Gobierno nacional ha anunciado que la próxima semana se llevará a cabo una sesión para evaluar el posible reajuste del precio del diésel. Actualmente mantenido en un promedio de $9.065 por galón en todo el país durante varios meses, el Estado asegura que se enfrenta a desafíos fiscales significativos derivados del déficit histórico del Fondo de Estabilización de los Precios de los Combustibles (FEPC), que ha alcanzado los $103,9 billones al cierre de 2023.
Durante dos reuniones previas, los ministerios de Hacienda, Transporte y Minas y Energía han analizado detenidamente la situación fiscal, centrando la atención en el impacto del déficit del FEPC. Según estimaciones del MinHacienda, la falta de ajuste en el precio del diésel podría aumentar el déficit del FEPC en $10,5 billones el próximo año.
El Gobierno Nacional informó que desde el año pasado ha optado por descongelar gradualmente los precios de los combustibles para hacer frente al déficit. Este proceso comenzó con la gasolina, y se espera que continúe con al menos dos incrementos adicionales, posiblemente en diciembre y enero, con el objetivo de evitar afectaciones a la inflación, según declaraciones del Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla González.
El ajuste propuesto en el precio del diésel tiene como objetivo reducir el déficit del FEPC este año a $20 billones, aunque la meta inicial era de $17 billones. Factores como la volatilidad en el precio internacional del barril de petróleo han dificultado alcanzar esta cifra.
El Ministro Bonilla González destacó la magnitud del desafío fiscal, señalando que entre 2021 y 2025, se proyecta un costo de $105 billones, equivalente a cinco reformas tributarias.
«El FEPC se comió los $20 billones de la reforma tributaria en 2023», afirmó el Ministro, subrayando la urgencia de abordar la deuda acumulada.