La negociación del salario mínimo en Colombia para el año 2024 se perfila como un punto crítico en las próximas semanas, ya que representantes sindicales, empresarios y delegados gubernamentales se preparan para iniciar las discusiones.
Hasta ahora, diversas propuestas han emergido, reflejando perspectivas divergentes sobre el impacto económico y social que podría tener un ajuste en los ingresos de los trabajadores. Un grupo respaldado por representantes sindicales aboga por un aumento del 10%, lo que implicaría un incremento de 116.000 pesos, elevando el salario mínimo a 1′276.000 pesos, sin incluir el auxilio de transporte. Por otro lado, se ha planteado una propuesta más audaz, proponiendo un aumento del 12%, equivalente a 139.200 pesos, fijando el salario en aproximadamente 1′300.000 pesos.
Sin embargo, los empresarios expresan reservas ante un aumento significativo, argumentando que podría tener repercusiones negativas en la economía nacional. Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, enfatiza la necesidad de abordar la discusión con sensatez y responsabilidad, evitando decisiones populistas que podrían no ser sostenibles a largo plazo.
Entre los factores que respaldan la solicitud de un aumento, los representantes sindicales destacan la inflación, que cerraría el año cerca del 10%, y la necesidad de garantizar un salario que vaya en concordancia con el costo de la vida.