El presupuesto propuesto por el Gobierno para 2025, que alcanza los 523 billones de pesos e incluye una partida de 12 billones para una reforma tributaria, fue rechazado por las comisiones económicas del Congreso.
El rechazo se fundamenta en preocupaciones sobre un déficit financiero potencialmente insostenible, relacionado principalmente con la reforma tributaria. En medio del debate, el senador Miguel Uribe tuvo un enfrentamiento con Alexander López, director del Departamento Nacional de Planeación, acusándolo de corrupción y mal manejo de los recursos públicos.
La senadora Angélica Lozano también presentó una propuesta alternativa para reducir el presupuesto a 499 billones, pero esta no recibió apoyo suficiente. Ahora se está considerando una propuesta del presidente del Senado, Efraín Cepeda, que sugiere un ajuste a 511 billones, en línea con la capacidad de ejecución del Gobierno según los anexos del presupuesto.
El Ministerio de Hacienda había presentado un presupuesto que se divide en 511 billones asegurados y 12 billones dependientes de la reforma tributaria. El objetivo principal del presupuesto es estimular la reactivación económica y financiar sectores clave como salud, educación e infraestructura. Se destinarán 327,9 billones a gastos de funcionamiento, 112,6 billones al servicio de la deuda y 82,5 billones a inversión.
Jairo Alfonso Bautista, director de Presupuesto, aseguró que el mismo busca respetar la regla fiscal y es diseñado para ser alcanzable y ejecutable. Los ministerios con mayores asignaciones serán Educación, Salud, Trabajo y Defensa. Además, el Gobierno espera recaudar 317,4 billones a través de la Dian, sin tener en cuenta los posibles efectos de la reforma pensional propuesta por el presidente Gustavo Petro.