Una investigación reciente reveló que más de 400 bienes entregados por exparamilitares, ahora designados como gestores de paz, no figuran en el inventario oficial del Fondo para la Reparación de las Víctimas. Esta omisión ha generado preocupación entre las autoridades, que buscan esclarecer la situación y garantizar que los bienes sean utilizados para reparar a las víctimas del conflicto armado.
La Unidad para las Víctimas y la Fiscalía General de la Nación están trabajando conjuntamente para agilizar los procesos de extinción de dominio pendientes y verificar la información sobre los bienes destinados a la reparación. También se ha detectado que más de 1.300 propiedades están bajo ocupación no autorizada, lo que genera pérdidas en recursos públicos.
Las autoridades han programado una reunión para evaluar los avances en la investigación y tomar medidas para garantizar que los bienes sean utilizados para su fin previsto. La colaboración con la Sociedad de Activos Especiales (SAE) también está siendo considerada para verificar la información sobre los bienes.