Tras el pitazo final en el estadio Metropolitano de Barranquilla, el ambiente entre los equipos de Colombia y Argentina se tornó tenso. La victoria de Colombia en este encuentro estuvo marcada por polémicas arbitrales y un incidente que involucra al arquero argentino Emiliano Martínez, cuyo gesto ha causado revuelo en las redes.
Durante el saludo a sus compañeros tras el partido, Martínez fue captado por las cámaras mientras, sin previo aviso, propinaba un manotazo a un camarógrafo de televisión. El camarógrafo afectado, quien estaba en medio de la cobertura del partido, comentó que la agresión le causó una gran rabia, aunque decidió no responder al arquero para evitar escalar el conflicto. Este incidente ha suscitado preocupación sobre posibles sanciones por parte de la Conmebol o la FIFA.
Ambas organizaciones tienen normas estrictas para manejar estos comportamientos. Según el Código Disciplinario de la FIFA, cualquier agresión física a personas ajenas al cuerpo arbitral puede acarrear sanciones severas. El Capítulo 2 del reglamento establece que los jugadores y oficiales que cometan tales infracciones pueden enfrentar suspensiones. En particular, el reglamento señala que agredir a otro individuo puede resultar en una sanción mínima de tres partidos o un periodo de tiempo equivalente sin jugar.
Este tipo de incidentes no solo afectan la reputación del jugador involucrado, sino que también pueden tener un impacto significativo en su equipo y en la percepción pública del deporte. La posible sanción de Martínez será revisada según las normativas establecidas, y se espera que la FIFA tome una decisión en los próximos días.