El nombre de la ilustradora barranquillera Geraldine Fernández, era para muchos absolutamente desconocido, hasta que este 15 de enero estalló el escándalo de que ella mintió en su testimonio al decir que había hecho parte del equipo de la película ‘El niño y la garza’, la cual fue hecha por Studios Ghibli y ganó un Globo de Oro.
Fernández aseguró que ella hizo unos 25 mil fotogramas para esta producción cinematográfica y que fue la única colombiana dentro del equipo de origen japonés, dirigido por el legendario ilustrador Hayao Miyazaki. Afirmó que la acogida de sus compañeros fue buena, que trabajó de manera remota desde Barranquilla y que tuvo que adaptarse a los horarios de labores del país asiático.
Sin embargo, rápidamente los internautas se dieron cuenta que a pesar de su testimonio, ella no aparecía en los créditos de la cinta antes mencionada y con eso empezaron los reproches a sus afirmaciones falsas.
Posteriormente ella dio la cara y admitió que hubo falsedades en sus declaraciones, pero no aceptó que mintió completamente, sino que dijo que exageró, pues no hizo 25.000 fotogramas sino entre 2002 y 300. Es decir, sostiene que sí hizo parte del filme creado por Miyazaki y que no aparece en los créditos porque la la englobaron dentro de lo que se llama «casa de soporte de animación».
La joven dijo que las últimas horas han sido caóticas en su vida, porque no bastando con todo el acoso y con todos los comentarios que se han dicho en su contra en redes sociales, en su trabajo también le habrían pedido la renuncia. Hizo un llamado a la reflexión y manifestó que nadie se ha detenido a pensar si ella pudiese contemplar el suicidio ante la presión social.
“Pero de lo que me arrepiento también es que, o sea por más de asumir el error, también me arrepiento de que la vida me haya cruzado con personas en las cuales lo único que generan es hacerme daño. O sea, yo me puedo llegar a suicidar y aquí el mundo le vale un c#lo”, indicó.