El limón es una fruta comúnmente asociada con bebidas refrescantes como la limonada, pero sus propiedades van mucho más allá. Es común encontrar productos de limpieza en los supermercados que incluyen limón en sus ingredientes, especialmente por los beneficios que ofrece en tareas de desengrase y limpieza profunda.
Además de la pulpa, la cáscara del limón es especialmente valiosa. Según Eleonora Dubini, experta en cosmética natural y aromaterapia, el aceite contenido en la cáscara tiene propiedades desengrasantes y disolventes naturales. Este aceite es biodegradable y se utiliza en diversas aplicaciones industriales, como la limpieza de motores, disolución de resinas y tintas, y la eliminación de grasa y suciedad en superficies como el asfalto y las alcantarillas.
El limón no solo es un ingrediente esencial en la cocina, sino también un aliado poderoso para mantener limpias nuestras superficies de manera natural y ecológica.