Muchos de los productos que hoy en día consumen miles de colombianos, aumentarán de precio a partir del mes de noviembre de 2023, como resultado del gravamen que se les hará con base en lo establecido en la reforma tributaria, la cual aprobó el Congreso de la República en 2022.
En general se habla de alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas, en su mayoría gaseosas, líquidos energizantes, productos como arequipe, leche condensada, helados, entre otros, y el gravamen, es decir el aumento, varía de acuerdo a la cantidad de azúcar que tengan. Si tienen entre 6 gramos y 10 gramos de azúcar, pagarán $18 pesos por cada 100 mililitros, y aquellas con más de 10 gramos de azúcares añadidos pagarán $35 por la misma cantidad.
Dentro de la lista de productos que aumentarán su precio están los siguientes:
- bebidas gaseosas o carbonatadas
- bebidas a base de malta
- bebidas tipo té o café
- bebidas a base de fruta en cualquier concentración, refrescos, zumos y néctares de fruta
- bebidas energizantes
- bebidas deportivas
- refrescos, aguas endulzadas o saborizadas
- Concentrados, polvos y jarabes que, después de su mezcla o dilución, permiten la obtención de bebidas azucaradas, energizantes o saborizadas.
- Se exceptúan los derivados lácteos.
- Carne y despojos comestibles; harina y polvo comestibles.
- Embutidos y productos similares de carne o despojos.
- Papas fritas
- Patacones
- Chicharrones empacados
- Snacks o pasabocas empacados
- Galletas dulces (con adición de edulcolorante)
- Barquillos, obleas y wafles.
- Ponqués y tortas
- Bizcochos y pasteles de dulce
- Merengues
- Confites de chocolate
- Helados y postres a base de leche (incluido el arequipe)
- Manjar blanco o dulce de leche
- Cereales
- Cacao en polvo con adición de azúcar u otro edulcorante
- Confites de chocolate
- Salsas y sopas
En desacuerdo
Pese a que ya es un hecho, se siguen manifestando voces en desacuerdo con esta medida, dado que casi todos los productos antes mencionados son los que se venden en las tiendas de barrio, y eso supondrá que debe haber un mayor nivel de inversión para los pequeños comerciantes y una meta más alta de ventas por cumplir.
“La mayoría de las ventas de las tiendas están en esas dos categorías, así que eso va a tener una afectación porque subirá el precio de los alimentos y va a contribuir al alza de la inflación. Adicionalmente, esto va a tener afectación en las ventas de las tiendas y en el consumo de gente que, lamentablemente, tiene que comprar este tipo de productos y van a tener que pagar más por los mismos”, dijo Oscar Darío Pérez, representante a la Cámara por el Centro Democrático.