En una reciente reunión, Gustavo Bolívar, director del Departamento de Prosperidad Social (DPS), expresó sus reservas sobre la efectividad de los subsidios para combatir la pobreza en Colombia. A pesar de que el presidente Gustavo Petro había defendido estos auxilios durante su campaña, Bolívar sostiene que los subsidios, lejos de brindar una solución sostenible, perpetúan un ciclo de dependencia en los beneficiarios. En lugar de los subsidios tradicionales, Bolívar propone un enfoque más orientado al desarrollo de proyectos productivos y la facilitación del acceso al crédito, con el objetivo de fomentar la autonomía económica de las personas en situación de vulnerabilidad.
Según detalló Bolívar, el DPS dispone actualmente de un presupuesto de 75 mil millones de pesos destinado a transferencias directas. Sin embargo, el director indicó que se planea solicitar 450 mil millones adicionales para el próximo año, fondos que serían redirigidos hacia iniciativas de emprendimiento y financiamiento de pequeños proyectos empresariales. Esta propuesta, alineada con los lineamientos del Plan Nacional de Desarrollo, busca transformar los programas de asistencia social en rutas de emprendimiento para los hogares más vulnerables del país.
Bolívar explicó que su propuesta incluye facilitar el acceso a capital semilla y a préstamos de bajo interés a través del Banco Agrario, permitiendo así que las personas puedan establecer negocios propios y generar ingresos sostenibles. En palabras del funcionario, el cambio en la asignación de recursos podría ser polémico, ya que muchos ciudadanos dependen de los subsidios para cubrir necesidades básicas. No obstante, Bolívar subrayó que, a largo plazo, estos apoyos deben evolucionar hacia estructuras que fomenten la independencia económica.
El DPS estima que alrededor de 600 mil familias colombianas son beneficiarias de subsidios. Sin embargo, la propuesta de Bolívar pretende que estas ayudas progresivamente se transformen en herramientas para crear empresas asociativas y mejorar el acceso al crédito. Según el director, el objetivo final es lograr que las familias puedan romper con la pobreza estructural y avanzar hacia un futuro con mayores oportunidades económicas.
Esta propuesta marca una posible transformación en la política de asistencia social en Colombia, orientándola hacia el fortalecimiento de proyectos de emprendimiento que, en lugar de ofrecer una ayuda momentánea, impulsen la autosuficiencia económica y la reducción de la pobreza a largo plazo.