En entrevista exclusiva para la revista Semana, los fiscales Mabel Morales y Óscar Gutiérrez, quienes se vieron involucrados en el caso Laura Sarabia, entregaron detalles de cómo algunos miembros de la DIJÍN los engañaron para que interceptaran la línea telefónica de dos empleadas domésticas de la funcionaria de Gobierno.
Esas dos empleadas fueron una que se dedicaba a las labores del hogar, y la otra la niñera Marelbys Meza, quien se encargó de destapar el escándalo al contar lo sucedido al medio de comunicación antes mencionado y afirmar que cuando la convirtieron en sospechosa del robo que ocurrió en enero de 2023 en la casa de Sarabia, la hicieron sentir «secuestrada» cuando la sometieron al polígrafo.
La Fiscalía confirmó que las líneas telefónicas de esas dos empleadas se interceptaron mediante una orden expedida por los fiscales antes citados, pero estos fueron engañados por los informes adulterados que entregó la DIJÍN.
“Me solicitan la interceptación de un abonado telefónico y búsquedas selectivas. En ese momento, como lo dije en la declaración anterior, les advertí que no tenía un motivo fundado para interceptar ese abonado que me pedían y que necesitaba la ampliación de denuncia de la víctima, de la señora Laura Sarabia”, dijo la fiscal Morales.
“Ellos se dan cuenta de que el informe que me dieron no corresponde al que habían desarrollado. Ni la fecha, ni la hora coinciden y, además, dan cuenta de una entrevista que relacionan como anexos a un conductor y advierten que ellos no la habían realizado”, agregó.
Recordemos que pese a todo el escándalo cuya investigación hoy sigue en curso, Laura Sarabia fue nombrada como directora de Prosperidad Social, tras salir del gabinete presidencial.