Un hombre fue capturado por la Policía Nacional en el barrio La Floresta de Montería mientras intentaba robar gasolina de una motocicleta. A pesar de la evidencia y la identificación del sospechoso a través de cámaras de seguridad, la Policía decidió liberarlo bajo el argumento de que se trataba de un delito de «mínima cuantía».
La decisión ha generado un fuerte malestar entre los residentes de La Floresta, quienes consideran que la política de «mínima cuantía» no es efectiva para prevenir la delincuencia en la zona. Los habitantes piden a las autoridades una respuesta más rigurosa para frenar los robos menores, que se han vuelto frecuentes en la zona.
El incidente ha puesto sobre la mesa el debate sobre la eficacia de la política de «mínima cuantía», que permite la libertad inmediata de personas capturadas en flagrancia por delitos considerados menores. Para la comunidad, esta medida se traduce en inseguridad e impunidad, lo que deja a los vecinos expuestos a la reiteración de los delitos por parte de los mismos infractores.