La inflación en Estados Unidos batió un nuevo récord al situar su tasa interanual en el 9,1 %, la cifra más alta en los último 40 años según los datos publicados por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS).
La subida mensual de los precios de consumo fue del 1,3%, mientras que el alza de los precios de la gasolina y los alimentos fue lo que más influyó en esta nueva escalada de la inflación.
Por su parte, el incremento de los precios de la energía fue del 7,5 % en un mes y contribuyó a casi la mitad de la subida mensual, pues las materias primas de la energía marcaron un alza del 60,6%, mientras los servicios de energía se incrementaron en un 19,4%.
En cuanto a los alimentos, sus precios han subido en un año el 10,4 %, la mayor alza desde febrero de 1981.