El exjefe paramilitar Salvatore Mancuso está próximo a regresar a Colombia después de cumplir una condena por narcotráfico en Estados Unidos, según informaciones divulgadas el lunes 19 de febrero, entre otras fuentes, por el expresidente Álvaro Uribe Vélez.
Mancuso, quien espera acogerse a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), ha señalado en audiencias ante el tribunal transicional la presunta implicación del exmandatario en el accionar delictivo de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), incluso durante su gestión como gobernador de Antioquia.
La resolución de la situación migratoria de Mancuso en Estados Unidos ha estado pendiente, mientras el exparamilitar adelantaba diligencias ante la JEP en ese país para recibir beneficios. Según información que pudo corroborar la prensa, Mancuso estaría de regreso en Colombia en los próximos 15 días, con protección para él y sus abogados, según lo indicado en una publicación en el perfil de redes sociales del expresidente Uribe Vélez.
La noticia generó controversia, recordando que Mancuso fue extraditado a Estados Unidos durante el segundo mandato de Álvaro Uribe, a pesar de haberse acogido al programa de Justicia y Paz en 2005. Este programa buscaba la desmovilización de las estructuras de las AUC, incluyendo el Bloque Catatumbo, implicado en masacres como las de Mapiripán, El Aro y La Gabarra.
La revelación de la inminente llegada de Mancuso a Colombia ha reavivado el debate sobre el papel de las AUC en el conflicto armado colombiano y las posibles implicaciones políticas de sus testimonios ante la JEP. Su regreso plantea interrogantes sobre la reconciliación nacional y la búsqueda de la verdad y la justicia en el proceso de paz en Colombia.