Este martes el Vaticano reveló detalles de una nueva declaración del Papa Francisco sobre uno de los temas más polémicos durante la historia contemporánea: la posición de la iglesia frente a la unión en matrimonio de parejas del mismo sexo.
Esta vez el sumopontíficie lo hizo respondiendo a una carta que le enviaron cinco cardenales conservadores, en la que también le preguntaron sobre otro tema que abre mucho debate, como lo es la ordenación sacerdotal femenina, es decir, la existencia de mujeres cura.
En cuando a la bendición de la iglesia católica a las parejas homosexuales, el Papa manifestó que es importante que los líderes de sectores interreligiosos puedan apelar a la «calidad pastoral» a la hora de emitir un juicio de opinión sobre un determinado tema. También dijo que cuando alguien pide una bendición, es como si estuviese pidiendo un pedido de auxilio a Dios y este no le puede ser negado, partiendo desde la empatía y el amor.
“En el trato con las personas no hay que perder la caridad pastoral, que debe atravesar todas nuestras decisiones y actitudes. La defensa de la verdad objetiva no es la única expresión de esa caridad, que también está hecha de amabilidad, de paciencia, de compresión, de ternura, de aliento. Por consiguiente, no podemos constituirnos en jueces que sólo niegan, rechazan, excluyen”, dijo la máxima autoridad de la iglesia católica.
“Por ello la prudencia pastoral debe discernir adecuadamente si hay formas de bendición, solicitadas por una o por varias personas, que no transmitan una concepción equivocada del matrimonio. Porque cuando se pide una bendición se está expresando un pedido de auxilio a Dios, un ruego para poder vivir mejor, una confianza en un Padre que puede ayudarnos a vivir mejor», agregó.
Finalmente dijo que «si bien hay situaciones que desde el punto de vista objetivo no son moralmente aceptables, la misma caridad pastoral nos exige no tratar sin más de ‘pecadores’ a otras personas cuya culpabilidad o responsabilidad pueden estar atenuadas por diversos factores que influyen en la imputabilidad subjetiva».