Guillermo Lasso firma el decreto 741 para enfrentar la crisis política del país y gobernar mediante decretos por seis meses.
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, firmó el decreto 741 con el que disuelve la Asamblea Nacional y le otorga al mandatario seis meses para gobernar bajo decretos. Esta decisión, también conocida como ‘muerte cruzada’, significa que los ecuatorianos tendrán que elegir un nuevo presidente y asambleístas.
La firma de este decreto se produce después de que se iniciara un juicio político contra el presidente Lasso en la Asamblea Nacional por corrupción y malversación de fondos públicos. En su mensaje a la nación, Lasso explicó que tomó esta decisión para «dar una solución a la crisis política que vive el Ecuador (…) hoy comparezco ante ustedes para decirles que no es posible avanzar, un sector de la política social ha intentado deponer al gobierno».
Lasso denunció que el juicio político en su contra tenía como objetivo desestabilizar su gobierno y permitir que un grupo de políticos se tomara la presidencia y usurpara el Estado. El presidente también destacó que ha intentado promover el diálogo político para garantizar la estabilidad del Estado, pero que los ataques a su gestión no han cesado.
El decreto del presidente Lasso pide al Consejo Nacional Electoral convocar elecciones «dentro del plazo de 7 días de conformidad con lo establecido en el inciso tercero del artículo 148 de la Constitución de la República». Además, se especifica que los periodos de legislatura en la Asamblea quedan terminados y que los contratos del personal legislativo ocasional también se terminarán sin derecho a reparación o indemnización.
La decisión del presidente Lasso de disolver la Asamblea Nacional ha generado controversia en el país, con algunas voces que apoyan su decisión y otras que la consideran un golpe a la democracia. La incertidumbre política continúa en Ecuador mientras se espera la convocatoria a nuevas elecciones.