Andrés Parales es un uniformado de la Policía que desde los 15 años se congrega en la iglesia Lavey, en la cual la adoración y la fe se tiene es en satanás. Pese a los cuestionamientos que ha enfrentado a lo largo de su corta de vida, él hasta ahora se mantiene firme en su convicción de credo.
Sin embargo, el satanismo no le ha servido de mucho dentro de las filas de la Policía, teniendo en cuenta que esta es una institución católica, no en vano la frase más notoria en su insignia es «Dios y patria».
Es por ello que este joven oriundo de la ciudad de Bucaramanga ha decidido emprender acciones legales con el fin de que los altos mandos de la Policía Nacional respeten su libertad religiosa y de culto y no obliguen a hacer actos como por ejemplo, repetir la oración católica.
Vale decir que además de Policía, Andrés Parales tiene en marcha estudios en la carrera de derecho, se desempeña como locutor y escritos, y ya lanzó su primer libro. Además, se define a sí mismo como activista y creador de contenido.