En los últimos días, Diego Cancino ha estado en el centro de la atención mediática tras ser objeto de varias denuncias por acoso, acumulando un total de cuatro quejas en su contra. La más reciente proviene de una periodista de RTVC, llamada Ana María Vélez, quien decidió hacer pública su experiencia a través de las redes sociales, en respuesta a las críticas que han enfrentado otras mujeres que han denunciado situaciones similares.
La periodista relató que los incidentes ocurrieron el 12 de julio, cuando Cancino, quien fue nombrado presidente de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), le envió mensajes en horarios inapropiados, proponiéndole una cena para disculparse por no asistir a un programa en el que ella lo había invitado. Ella compartió los chats donde se evidencia el tono de las invitaciones, que consideró inapropiado y despectivo.
En su testimonio, la comunicadora mencionó que estas acciones podrían reflejar un patrón de comportamiento de ciertos hombres en posiciones de poder, que no muestran el debido respeto ni límites hacia las mujeres. Destacó que, aunque sus acciones pueden no ser consideradas delitos, sí constituyen una falta de respeto y un abuso de poder.
Por ello hizo un llamado claro a que Cancino se aparte de su cargo, argumentando que su conducta no debe ser ignorada y debe establecerse un precedente en el ámbito laboral. También instó a la Fiscalía a investigar a fondo las denuncias y a no estigmatizar a las mujeres que se atreven a hablar sobre sus experiencias.